La resistencia al envejecimiento de adhesivos acrílicos en base agua con PSA es la capacidad de los adhesivos acrílicos en base agua sensibles a la presión para mantener sus propiedades de rendimiento — poder de adherencia inicial (tack), adhesión, cohesión y apariencia — durante períodos prolongados (meses o años) cuando están expuestos a factores ambientales como calor, humedad, luz UV y oxígeno, asegurando una fiabilidad a largo plazo en aplicaciones como señalización exterior, etiquetas duraderas y uniones estructurales. El envejecimiento puede causar degradación mediante oxidación (ruptura de cadenas poliméricas), hidrólisis (ruptura de enlaces éster en condiciones húmedas) o entrecruzamiento inducido por UV (fragilidad), lo cual lleva a una disminución del poder de adherencia inicial, desprendimiento o decoloración. Para mejorar la resistencia al envejecimiento, los formuladores incorporan antioxidantes (por ejemplo, fenoles bloqueados, fosfitos) que capturan los radicales libres generados por la oxidación, ralentizando la degradación del polímero y manteniendo la cohesión. Los estabilizadores UV (por ejemplo, bencofenonas, estabilizadores de aminas bloqueadas) absorben o neutralizan la radiación UV, previniendo daños fotoquímicos y preservando la flexibilidad, fundamental para aplicaciones exteriores. Monómeros resistentes a la hidrólisis, como el metacrilato de metilo y el acrilato de isobornilo, se utilizan para reemplazar monómeros más sensibles al agua, reduciendo la susceptibilidad a degradación inducida por humedad. El entrecruzamiento con entrecruzadores estables (por ejemplo, basados en epoxi) crea una red polimérica robusta que resiste la ruptura de cadenas, mejorando la integridad estructural con el tiempo. Materias primas de alta pureza y controles estrictos durante la fabricación minimizan impurezas (por ejemplo, metales traza) que pueden actuar como catalizadores de degradación. Las pruebas implican protocolos de envejecimiento acelerado: exponer el adhesivo a temperaturas elevadas (60–80 °C), alta humedad (80–90 % HR) y luz UV (usando lámparas de arco de xenón) durante períodos prolongados, midiendo luego los cambios en el poder de adherencia inicial, resistencia al despegue, resistencia al cizallamiento y color. Estas formulaciones aseguran que los adhesivos PSA acrílicos en base agua conserven sus características de rendimiento durante la vida útil prevista, ya sea en etiquetas exteriores que soportan años de intemperie o en dispositivos médicos que requieren estabilidad adhesiva prolongada.